17/06/2025
Cómo cuido mi voz en verano (más allá de los remedios típicos)
Cuando nacieron mis hijos leí un libro titulado “Cómo criar a un hijo sano a pesar de su médico”. Gracias a él he conseguido que ni ellos ni yo hayamos pasado nunca la gripe, ni ninguna de esas “itis” típicas en los niños. ¿Cómo lo hice? No creo en la suerte, sí en la PREVENCIÓN
Dicho esto… en verano es un reto para quienes trabajamos con la voz: locutores, actores de doblaje, cantantes, docentes o streamers. Y no solo por el calor, sino por el aire acondicionado, los cambios bruscos de temperatura, la deshidratación… y hasta lo que comemos.
Como locutora profesional, proteger mi voz es parte de mi trabajo. Así que vamos a hablar de
mis estrategias preventivas para cuidar la garganta, la lengua y toda la glotis durante esta época:
Aire acondicionado y terrazas: ponlos a tu favor
Yo evito usarlo. Soy friolera, así que aguanto bastante el calor. Pero si lo usas, actívalo en el modo “dry” o deshumidificador para evitar el exceso de sequedad en el ambiente. La temperatura ideal entre 24-26 °C. y nunca nunca apuntes el chorro directo hacia ti.
En el estudio yo ventilo 10 minutos antes para evitar aire viciado y luego sí uso AC y mantengo la puerta de la cabina abierta mientras no la uso. Luego, evita realizar sesiones muy largas de grabación, o te ahogarás. Y no quieras estar sudado luego bajo el aire, verdad? Esto es horrible para la musculatura, y es ahí donde te resfrías.
Si sales a tomar algo, a cenar… ¡ojo a las terrazas! Observa dónde te sientas en esa terraza. Estar quieto en una terraza fresquita puede ser demoledor. Cuida mucho dónde te metes para tomar algo, y lleva siempre algo encima para proteger el cuello y la espalda.
Hidratación constante y consciente
Bebo agua antes, durante y después de cada sesión de grabación. Si te notas mal la garganta toma tomillo o manzanilla. Deja que se enfríe.
No tomes bebidas muy frías ni carbonatadas, que resecan la mucosa laríngea.
Siempre llevo agua a temperatura ambiente. La bebo a sorbos.
Alimentos a evitar para cuidar la voz:
Muy picantes o con especias fuertes; fritos o rebozados, que irritan la mucosa faríngea.
Nada de lácteos antes de grabar, que aumentan el moco. Tampoco es bueno comer tomates, cítricos ni chocolate negro (que generan reflujo), así como café… aunque yo sí los tomo.
Cuerpo en movimiento y silencio inteligente
Yo sigo saliendo a correr casi cuando anochece o al amanecer, pero evito hablar al correr o justo después. El vapor de la ducha es genial para las cuerdas vocales.
Otra cosa: la respiración profunda del yoga o del pilates ayuda a relajar la laringe.
Otra cosa: Si he tenido muchas grabaciones, practico lo que llamo “silencio consciente” para recuperarme.
Conclusión
El cuidado vocal no es solo calentar antes de grabar o tomar caramelos de miel. Es un estilo de vida.
La voz es cuerpo, respiración, hábitos… y prevención.
Si también trabajas con tu voz:
¿Qué haces tú para cuidarla en verano? ¡Te leo en comentarios!